Ensalada de Pulpo con Calabacín y Cebolla
- 500 g de pulpo, limpio y cocido
- 2 calabacines medianos
- 1 cebolla roja
- Aceite de oliva virgen extra
- Perejil fresco, finamente picado
- Pimienta negra recién molida
- Sal al gusto
- Jugo de limón
Después de limpiar bien el pulpo, sumérgelo en el agua un par de veces (hasta 3 veces), sosteniéndolo por la cabeza. Esto hará que los tentáculos se enrosquen, y este paso permitirá que la carne quede tierna y no gomosa. Luego sumérgelo por completo, cubre la olla con una tapa y cocina durante unos 25-30 minutos, reduciendo el fuego para mantener un ligero hervor.
Verifica la cocción insertando un tenedor en la parte más gruesa: si entra fácilmente, el pulpo está cocido. Deja enfriar y corta en trozos del tamaño deseado.
Lava los calabacines y córtalos en rodajas finas, utilizando una mandolina para obtener rodajas uniformes. Cocina las rodajas de calabacín en una sartén con un poco de aceite hasta que estén doradas. Sazónalas ligeramente y deja enfriar.
Corta la cebolla en tiras finas (juliana). En una sartén, calienta un poco de aceite y fríe la cebolla a fuego medio hasta que esté crujiente y dorada. Escurre el exceso de aceite en papel absorbente.
En un bol, mezcla el pulpo cortado, las rodajas de calabacín y la cebolla crujiente. Aliña con aceite de oliva virgen extra, jugo de limón, perejil picado, pimienta negra y sal al gusto. Mezcla suavemente para distribuir uniformemente los condimentos.
Deja reposar la ensalada en el refrigerador durante al menos 30 minutos antes de servir, para que los sabores se mezclen bien. Sirve la ensalada de pulpo con calabacín y cebolla crujiente como entrante o plato principal ligero.
¡Buen provecho! Para las cantidades según el número de comensales y cualquier duda, estamos siempre a tu disposición.